Berdoussis Hotel
Elafonisos - Elafonisos
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Elafonissos es la isla griega perfecta para los que piensan que «en el pequeño barril está el buen vino». En sólo 19 kilómetros cuadrados, condensa una cantidad ideal de playas de ensueño bañadas por un mar asombroso: las suficientes para no aburrirse, pero no demasiadas para no entrar en pánico a la hora de elegir cuál ver. Entre ellas se encuentra una de las 10 mejores playas de Grecia.
Pequeña en tamaño, Elafonissos (o Elafonisos) tuvo importancia estratégica en el pasado y a lo largo de los siglos estuvo habitada por griegos, árabes, venecianos y británicos. Aún pueden verse algunas reminiscencias venecianas.
También llamada Cervi, nombre curioso ya que aquí no se ven ciervos, no debe confundirse con la famosa playa de Elafonissi, en Creta. Se encuentra al sur del Peloponeso, la península dentada del sur de Grecia, en las mismas latitudes que las Cícladas; antaño también formaba parte del Peloponeso, pero se separó tras un terremoto.
La franja de mar que la separa del continente es corta, pero la distancia a los aeropuertos y puertos internacionales es larga, por lo que Elafonissos ha permanecido durante mucho tiempo fuera de las rutas turísticas clásicas. Hasta hace unos años, era el refugio de campistas y motoristas en busca de destinos menos conocidos. Hoy en día, el número de turistas ha aumentado exponencialmente, pero Elafonissos sigue teniendo un encanto auténtico, bello pero algo caótico en su arquitectura y en sus calles no comunicadas por transporte público.
Olvídate de los hoteles de diseño de Santorini, las fiestas transgresoras de Mykonos y los impecables servicios turísticos de las islas más famosas. A la diminuta Elafonissos la adoran sus aguas cristalinas, sus playas de arena perfectas de postal y poco más; no le falta entretenimiento, pero no esperes una vida nocturna desenfrenada: hay una buena selección de bares para pasar la noche, pero sólo una discoteca para bailar hasta tarde.
Es una isla para muchos, pero no para todos, ya sea porque cuesta un poco llegar o porque gustos son gustos. Si buscas excesos, glamour y vida social por un lado, y silencio absoluto por otro, no es para ti. Si quieres una mezcla de paz, paisaje y servicios, es el lugar adecuado.
Para el mar, ni que decir tiene que estás en el lugar adecuado: con unas vacaciones en Grecia, nunca puedes equivocarte.
Las playas de Elafonissos son sin duda la principal atracción de la isla, la verdadera razón por la que los turistas vienen aquí. Echemos un vistazo a las más bellas.
Simos es la reina de las playas de Elafonissos. No sólo es la más bella de la isla, sino que está considerada una de las más bellas de toda Grecia y, por tanto, es una visita obligada para cualquiera que venga de vacaciones aquí. Situada a lo largo de la costa sureste, es una playa de arena con aire caribeño que ocupa gran parte de la bahía de Sarraceno.
De fácil acceso, segura, dotada de servicios esenciales y, sobre todo, hermosa, Simos es una playa amada por igual por parejas, familias con niños pequeños y almas solitarias. En julio y agosto está muy concurrida, pero al ser muy grande es posible encontrar un rincón más tranquilo.
La playa está dividida en dos zonas separadas por un delgado istmo de arena que conduce a un pequeño promontorio: la zona más pequeña es muy popular porque está al abrigo del viento y las corrientes; la más grande es ideal para los que no les gusta la confusión, pero hay que tener en cuenta la posibilidad de viento y olas fuertes. Ambas se denominan generalmente Simos, pero en algunas guías puedes encontrar el nombre Sarakiniko para la mayor y Fragos para la menor.
Si buscas una playa equipada, ve a la más pequeña, donde hay dos establecimientos de baño; la más grande es libre y salvaje.
Lo que no cambia es su belleza: en ambas playas, la arena blanca es bañada por un mar azul cristalino; dunas de arena de hasta 10 metros de altura y cedros completan este maravilloso paisaje.
A la playa de Simos se llega dando un corto paseo desde el aparcamiento. Desde la playa, por otra parte, se puede caminar hasta la cima del promontorio, un mirador perfecto desde el que admirar ambas playas de un vistazo.
La segunda playa más famosa de Elafonissos es Playa de Panaghia2, situada en el lado opuesto de la isla. También se llama Kato Nisi (isla de abajo) y es una playa de arena dorada; unos cuantos islotes rocosos emergen aquí y allá del mar turquesa.
Kato Nisi es una buena mezcla de belleza paisajística y comodidad: se llega fácilmente en coche y el aparcamiento está justo al lado de la playa; en su mayor parte es gratuito, pero es posible alquilar tumbonas y sombrillas en una pequeña zona.
La playa «urbana» de Elafonissos, es Playa de Kontogoni3, situada en el pueblo principal. Es una playa equipada con una larga hilera de bares y restaurantes detrás, perfecta para quienes quieran tumbarse al sol sin sacar el coche y disfrutar de un aperitivo al atardecer con vistas al mar.
No lejos de Kontogoni está Playa de Kalogeras4, donde encontrarás arena más fina y mucho menos bullicio. Una playa aún menos conocida es la diminuta Lefki, una cala blanca no lejos de Simos.
Si mientras esperas para embarcar hacia Elafonissos o antes de volver al aeropuerto no quieres perder la oportunidad de darte un chapuzón, Playa de Pouda5 es una posibilidad a tener en cuenta.
Elafonissos es una clásica isla de vacaciones sólo de playa, desprovista de grandes atracciones históricas y culturales, pero eso no significa que falten cosas bonitas que ver.
La iglesia de Agios Spyridon es uno de los lugares más fotografiados de Elafonissos. Es una típica iglesia griega azul y blanca, más llamativa que otros edificios religiosos similares porque está construida sobre un islote deshabitado. El efecto es el de una iglesia suspendida sobre el mar y enmarcada por cedros. Construida en la segunda mitad del siglo XIX, está dedicada al santo patrón de la isla de Elafonissos.
No necesitas un barco para visitar Agios Spyridon: el islote sobre el que se alza está conectado a Elafonissos por un puente, por lo que se llega fácilmente a pie.
Hablando de tesoros, y esta vez hablamos de realidad histórica y no de mitología, no se puede dejar de mencionar Pavlopetri, la ciudad hundida que yace en el fondo de las aguas que rodean Elafonissos. Se trata de una antigua ciudad que data del año 3000 a.C., de la que hoy quedan unos 15 edificios a una profundidad de sólo 3-4 metros.
Por desgracia, no es posible bucear ni acercarse demasiado en barco porque la zona está estrictamente controlada para evitar el robo de hallazgos arqueológicos.
Algunos operadores locales organizan excursiones en barco que incluyen la posibilidad de bucear por encima de los hallazgos: sin embargo, esto sólo se recomienda a nadadores experimentados, ya que los barcos deben permanecer a cierta distancia. Elige con cuidado la excursión en la que participas; si tienes dudas sobre la seguridad, mejor déjalo estar.
Un monumento natural ineludible son las rocas de Vaporaky, cuya forma recuerda vagamente a la de un barco.
Una leyenda griega habla de un barco pirata que llegó a la isla hace siglos; cuando la tripulación intentó atacar una iglesia local, el barco quedó petrificado en la misma posición en que lo vemos hoy.
Menos sugerente es la explicación científica: se trata de rocas alisadas por la erosión del viento y el mar.
La naturaleza y la leyenda también se entrelazan en la zona de Karokofolià, una elevación a lo largo de la cual hay numerosas cuevas que, según se dice, sirvieron en su día de escondite de tesoros piratas.
En el siguiente mapa puedes ver la ubicación de los principales lugares de interés de este artículo.
Sólo hay un asentamiento en Elafonissos, del mismo nombre que la isla y situado en el extremo norte: es el puerto de embarcaciones de tierra firme y es aquí donde se concentra casi todo el alojamiento vacacional.
Hasta hace unos años, la oferta hotelera de Elafonissos era muy sencilla, consistente en estudios, B&B y pensiones bonitos pero básicos, adecuados para turistas con pocas exigencias.
Hoy es más amplia y variada, en particular hay una buena oferta de habitaciones y estudios situados cerca de las playas más cercanas al centro; los mejores tienen vistas al mar. El desarrollo del turismo también ha propiciado la apertura de un par de hoteles adecuados para quienes buscan algo más de comodidad.
Fuera de la ciudad de Elafonissos, las opciones siguen siendo muy limitadas… o inexistentes. Algo se puede encontrar en Kato Nisi, un pequeño grupo de casas en la parte occidental de la isla, en la playa del mismo nombre.
Tampoco hay muchas opciones de hoteles o apartamentos en los alrededores de la famosa playa de Simos; sólo hay un camping. Debido a la escasez de alojamiento, si quieres dormir en esta zona, es aconsejable reservar con mucha antelación; ten en cuenta que no hay tiendas ni bares y, por tanto, siempre te verás obligado a desplazarte para cenar.
Cuando busques tu hotel o apartamento en Elafonissos, recuerda que esta isla tiene un nombre similar al de una famosa playa de Creta: ten cuidado de reservar en el lugar correcto, comprobando que se trata de un hotel o apartamento en el Peloponeso.
Llegar a Elafonissos es un poco complicado porque no hay vuelos directos ni transbordadores. A la isla sólo se puede llegar en un pequeño ferry desde Pounta, una ciudad del sur del Peloponeso a unos 10 km de la ciudad de Neápolis. Los viajes en ferry de Pounta a Elafonissos son muy frecuentes (uno cada media hora en temporada alta) y la travesía dura sólo 10 minutos.
El problema es llegar a Pounta. Lo más fácil es coger un avión a Atenas y alquilar un coche en el aeropuerto; desde allí llegarás al puerto de Pounta en poco más de 4 horas conduciendo por una autopista de peaje.
Otra opción es llegar a Patras en barco. La distancia del puerto de Patras a Pounta es inferior a 400 km, pero calcula 5 horas o más para llegar, ya que tendrás que atravesar algunas zonas montañosas con carreteras sinuosas.
En verano también hay algunos vuelos de bajo coste a Kalamata, en cuyo caso los kilómetros en coche bajan a 200 y tardas unas tres horas.
Llegar a Elafonissos en transporte público es muy complicado porque hay que hacer numerosos transbordos, lo que aumenta desproporcionadamente la duración del viaje; por eso no lo recomendamos.
La isla de Elafonissos está bañada por el mar Egeo, entre el extremo sudoriental del Peloponeso (al norte) y la isla de Kythira o Cerigo (al sur).
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