Pocos hoteles, pocas carreteras asfaltadas, pocas playas equipadas: la isla de Serifos ha permanecido como un oasis de autenticidad no tocado por el turismo de masas. Una joya por descubrir, con más de 60 maravillosas playas bañadas por un mar turquesa y cristalino, crestas de color óxido, tamarindos e higueras que tiñen de verde el paisaje.
Debido a la escasez de alojamiento, muchos turistas prefieren quedarse en islas más turísticas y visitar Serifos en una excursión de un día, pero estas visitas relámpago implican largas horas de viaje en barco y no permiten captar la verdadera esencia de esta isla.
Es mucho mejor hacer como los turistas griegos, que es pernoctar aquí. Aprovecha los precios baratos de los hoteles y déjate sumergir por el ambiente relajado de la isla, la amabilidad de los isleños y la belleza del paisaje.
Serifos disfruta del típico clima mediterráneo de las islas griegas, con inviernos suaves y veranos cálidos y soleados. Al ser menos turística que otras islas, incluso en temporada alta no es caótica y los precios de los hoteles no suben excesivamente, por lo que puede decirse que la mejor época para ir a Serifos es durante el verano. En otras temporadas, los transbordadores se reducen considerablemente y llegar a la isla puede resultar un poco complicado.
Casi todas las playas de Serifos son de arena y pendiente suave, por lo que también son adecuadas para los bañistas inexpertos y los que viajan con niños. Ten en cuenta, sin embargo, que salvo contadas excepciones, no están equipadas y están completamente expuestas al sol, sin resguardo de la sombra.
Otra característica positiva de las playas de esta isla es que suelen estar poco concurridas, perfectas para quienes no gustan del bullicio de las playas más famosas.
Un posible escollo es el meltemi, el viento seco del Egeo que sopla en verano, bien conocido y temido. Las playas más expuestas son las del norte, así que evítalas si quieres estar resguardado.
Nombrada una de las playas más bellas del Egeo por Sunday Time, Psili Ammos es la playa más famosa de Serifos. Es la única que está ciertamente abarrotada durante la temporada alta, aunque es definitivamente más tranquila que las playas de las islas más turísticas. Es una pintoresca playa de arena pálida bañada por aguas azules cristalinas, en la que crecen unos cuantos arbolitos, muy apreciados por los turistas por su sombra.
También es muy pintoresca la playa de arena de Agios Sostis, situada en una pequeña bahía dominada por una bonita iglesia azul y blanca. Se llega a ella por un camino de tierra y luego un corto paseo.
Las playas «urbanas», si se pueden llamar así, de Livadi y Livadakia, enmarcadas por hileras de tamariscos y algunas tabernas, también son hermosas.
Otras playas que no debes perderte en Serifos son:
Los asentamientos más importantes de la isla son Chora y Livadi. En Livadi se respira un ambiente vacacional y puedes relajarte curioseando por las tiendas de recuerdos y tomando una copa en uno de los muchos bares pequeños.
Chora, por su parte, es la joya de la isla, una típica ciudad cicládica con una cascada de casas encaladas, que te encantará con sus vistas panorámicas, sus características calles estrechas y sus empinadas pero pintorescas subidas y bajadas. Echa un vistazo al ayuntamiento neoclásico, la catedral y el kastro (fortaleza), antes de retirarte a la cima para admirar embelesado las vistas.
Si has alquilado un coche (¡muy recomendable!) puedes dedicar una tarde a visitar el interior. Pasa algún tiempo en pueblos del interior, como Galani, Kentharcos y Panagia, y de camino detente a echar un vistazo al monasterio de Taxiarchon, que lleva el nombre de los santos patronos de la isla.
Serifos no es un destino recomendado para los amantes de la vida nocturna y el entretenimiento. En cuanto a actividades deportivas, tampoco hay muchas oportunidades: faltan las instalaciones y centros que hay en otras islas más turísticas.
Sin embargo, en lo que sí destaca Serifos es en el senderismo: esta pequeña isla es una de las pocas islas griegas que cuenta con una red de senderos señalizados, que suman nada menos que 80 km.
Practicar senderismo en Serifos no requiere conocimientos especiales, y los senderos suelen ser de longitud variable y poca pendiente, por lo que puedes elegir el que mejor se adapte a tu forma física. Al elegir el sendero, presta atención también al regreso: si es una distancia demasiado larga para ir y volver, asegúrate de que puedes tomar un autobús o un taxi de vuelta.
Otra actividad muy gratificante que hacer en Serifos es comprar productos locales, como queso de cabra, miel, alcaparras y vino.
El turismo en Serifos está menos desarrollado que en otras islas Cícladas: tenlo en cuenta al planificar tus vacaciones o excursiones de un día.
Los coches de alquiler y los taxis en la isla son escasos, por lo que siempre hay que reservarlos. En las playas no suele haber bares ni restaurantes, por lo que conviene llevar mucha agua y comida de casa. La mayoría de las carreteras están sin asfaltar, y algunas tienen algunos baches: ten cuidado al conducir.
Estos pequeños inconvenientes se verán compensados con creces por la belleza y la tranquilidad de la isla.
Serifos es una isla que aún no ha sido tocada por el turismo de masas, por lo que la oferta hotelera es limitada. Aunque la oferta no es muy amplia, se pueden encontrar alojamientos de varias categorías, desde económicos hasta de 4 estrellas, pero no esperes encontrar los exclusivos hoteles de diseño con piscinas infinitas de las islas más glamurosas.
La mayoría de los hoteles, pensiones y casas de vacaciones se concentran en Serifos Chora y Livadakia, un suburbio de Livadi, uno de los principales puertos de la isla. Serifos Chora es sin duda más pintoresca y romántica, pero ofrece menos instalaciones.
Serifos es una buena opción para los viajeros de bajo coste: los precios medios de hoteles y apartamentos son mucho más bajos que en otras islas griegas, sobre todo si se comparan con los de Mykonos y Santorini.
Ofrecemos una selección de hoteles en Serifos para todas las categorías de viajeros. Los más reservados por los turistas son los hoteles frente al mar, a menudo directamente en la playa. Si quieres ir a lo seguro, elige uno de los siguientes: están entre los hoteles más reservados de Serifos ordenados según el número de opiniones.
Si prefiere el espacio, la intimidad y la posibilidad de preparar las comidas de forma independiente a unas vacaciones en un hotel, reserve una casa de vacaciones en Serifos. A continuación te recomendamos algunas, pero en este caso te aconsejamos que reserves pronto porque las casas y pisos de alquiler en Serifos están muy solicitados.
La isla de Serifos no tiene aeropuerto y, por tanto, no se puede llegar a ella en vuelo directo. Sin embargo, gracias a su proximidad a Atenas (a unos 170 km del puerto del Pireo), se puede llegar a la isla con bastante facilidad: desde la capital griega, en temporada alta, salen diariamente hacia Serifos 3-4 hidroalas y transbordadores a Milos.
La duración del viaje en barco varía según la compañía, pero normalmente en hidroala llegas a tu destino en menos de tres horas.
También hay transbordadores a Serifos desde otras islas griegas, como Mykonos, Naxos y Santorini.
¿Qué tiempo hace en Serifos? A continuación se muestran las temperaturas y previsiones meteorológicas en Serifos durante los próximos días.
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