
Rodas es una isla muy grande: unos 80 km separan el extremo norte de la isla de su extremo sur. Por tanto, conviene elegir bien dónde alojarse para evitar pasarse la mayor parte de las vacaciones en un coche yendo de aquí para allá.
La buena noticia es que todas las atracciones turísticas se concentran en la costa este de la isla, en los 50 km que van de la ciudad de Rodas a Lindos. La costa oeste está azotada por el meltemi y casi ignorada por los turistas. Puede ser interesante verla para descansar de los lugares más concurridos, pero no es una zona ideal para alojarse.
De los complejos de la costa este, algunos son más adecuados para jóvenes al acecho, otros para parejas en una escapada romántica, mientras que otros atienden a todos los gustos y necesidades.
He aquí una miniguía sobre dónde alojarse en Rodas que te ayudará a encontrar el centro turístico y el hotel más adecuados para el tipo de vacaciones que sueñas.

Dormir en la ciudad de Rodas es la opción ideal para quienes, incluso en unas vacaciones de playa, no quieren perderse la vida de la ciudad. De hecho, la capital de la isla es una ciudad muy animada, llena de oportunidades para visitas culturales, compras y vida nocturna.
Muy cerca del aeropuerto, es perfecta para los que se quedan en Rodas poco tiempo y luego se desplazan a otras islas, para los que quieren una base fija desde la que viajar en autobús o con excursiones organizadas y para los que simplemente no quieren moverse.
Si, por el contrario, quieres una base desde la que salir todos los días para hacer visitas de un día, puede que la ciudad de Rodas no sea la mejor opción, dada su ubicación en el extremo norte de la isla.
En cuanto al alojamiento, hay para todos los gustos y presupuestos.

La ciudad de Lindos es sin duda la más bella de la isla. Es una Rodas de postal, la que más encarna la imaginería isleña griega: una cascada de casitas blancas aferradas a las laderas de una colina que se derrama en un mar implacablemente azul. En lo alto de la colina se alza una fortaleza medieval que guarda en su interior los tesoros milenarios de la acrópolis.
Aunque ahora es un popular destino turístico, Lindos ha conservado su encanto y es el lugar ideal para alojarse si buscas lugares románticos, tabernas tradicionales y una mezcla de playas y atracciones culturales.
La oferta de alojamiento en Lindos es muy amplia, tanto en cantidad como en variedad, con algo para todos los bolsillos. En el pequeño centro de la ciudad hay pensiones, estudios y pequeños hoteles familiares; busca aquí si quieres vivir al máximo la mágica atmósfera de Lindos. Si, por el contrario, prefieres hoteles más modernos y complejos con todo incluido, vete un poco más lejos.
Faliraki es una típica ciudad pequeña que se desarrolló como consecuencia del auge del turismo. No tiene atracciones históricas y es poco romántica, pero en cambio encontrarás hermosas playas, una amplia oferta de hoteles y apartamentos de todos los precios y una impresionante variedad de tiendas, bares, restaurantes, parques infantiles y discotecas.
Es recomendable tanto para familias con niños pequeños (la playa de la ciudad tiene aguas poco profundas que permiten nadar y jugar sin peligro) como para jóvenes en busca de vida nocturna (Faliraki es famosa en toda Europa por sus discotecas y fiestas en la playa).
A sólo 6 kilómetros de Faliraki, Afandou es otro mundo, donde no llega el estruendo de las discotecas. Es el pueblo más antiguo de la isla y hoy un destino ideal para el turismo lento amante de la tranquilidad y de las especialidades gastronómicas y vinícolas locales.
No puede competir con los centros turísticos más famosos en cuanto a número de hoteles y apartamentos, pero la variedad es buena, desde sencillos hoteles económicos y apartamentos con servicios básicos hasta exclusivas villas y complejos de 5 estrellas.
Una alternativa a Lindos para quienes busquen romanticismo y relajación sin aglomeraciones turísticas es la pequeña ciudad de Kolymbia, al sur de Afandou. El centro de la ciudad se encuentra tierra adentro, mientras que el alojamiento para turistas se concentra en la zona del paseo marítimo.
Es un buen compromiso entre comodidades y encanto, este último debido en gran parte al bonito y pequeño puerto animado durante el día por los pescadores que vuelven del trabajo y por la noche por los turistas que se sientan en las mesas de los bares al aire libre para tomar una copa después de cenar.
Predominan las villas y hoteles de gama media y alta, con un buen número de balnearios sólo para adultos, ideales para unas vacaciones en pareja.
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